jueves, 21 de agosto de 2014

PESCA EN AUSTRIA 2014



El pasado 28 de julio Joaquín, Jorge y yo salimos del aeropuerto Adolfo Suárez en un vuelo con destino a Viena, de donde, después de cargar el equipaje, salimos en un coche alquilado hacia Sankt Georgen am Reith.


Una vez localizado el hotel y el apartamento, descargamos el equipaje y organizamos el equipo de pesca para que, al día siguiente, después del desayuno a las 8 am,  poder comenzar cuanto antes los 7 días de pesca previstos.


Los días 29 y 30 pescamos el río Ibbs, concretamente los tramos 4 y 2 respectivamente.


Las capturas fueron muy abundantes, obteniendo los mejores resultados, con muchísima diferencia, con la seca. A pesar de la enorme dificultad que conlleva en este río debido a sus aguas cristalinas y a su fondo claro casi blanco, lo que obliga a pescar con moscas relativamente grandes y con postes en colores llamativos para poder verlas.


Por la tarde del día 30 comenzó a llover y no paró en toda la noche continuando los chubascos el día 31. 

El día 31 debido a las lluvias el río Ibbs bajaba turbio y fuerte así que pescamos otro de los ríos previstos el río Salza.



El día estuvo desapacible con pequeños chubascos hasta que a la tarde empezó a llover con fuerza y no pudimos pescar ya que no paraba y después de esperar unas 2 horas dentro del coche a que cediera la lluvia desistimos y volvimos al hotel. 


Durante las 3 ó 4 horas que pescamos las capturas fueron abundantes, aunque hubo algún rato de poca actividad. De nuevo la pesca se hizo a seca, aunque al probar la ninfa funcionó mejor que en el Ibbs.


El cuarto día de pesca, dado que los ríos que teníamos previsto pescar estaban impescables, nos ofrecieron la posibilidad de pescar el Kleine Erlauf porque era el único que estaba pescable.


Ante la opción de no pescar o pescar el Kleine Erlauf estaba claro que había que elegir pescar. Nos encaminamos hacia el coto y lo empezamos a recorrer de abajo hacia arriba. Cuando ya pensábamos que no íbamos a poder pescar debido a la turbidez a pocos kilómetros del final estaba algo más claro y decidimos probar.


Después de pescar un pequeño tramo a seca en las posturas típicas sin ningún resultado, puse la ninfa y las capturas se produjeron con gran abundancia y de tamaños muy buenos, siendo la mayoría de entre 30 y 40 cm.


El quinto día de pesca amaneció con los ríos demasiado altos todavía por lo que repetimos en el Kleine Erlauf y como el agua ya estaba clara la pesca pasó a ser con la seca e igual de abundante que el día anterior con la ninfa.


El sexto día de pesca el Ibbs ya estaba pescable, aunque algo más alto de lo que sería ideal para acceder con comodidad a casi todas las posturas y pescamos el coto de Hollenstein, que incluye un kilómetro de uno de los afluentes el Klausbach.


La pesca se desarrolló muy bien, incluso en el tramo del Klausbach que pesqué, funcionando muy bien tanto la seca como la ninfa en algunos puntos concretos. Hasta que a media tarde una fuerte tormenta nos dejó el río muy turbio y nos obligó a finalizar la pesca unas horas antes de lo previsto.


El séptimo y último día, dado que las tormentas se estuvieron sucediendo toda la noche, nos vimos obligados de nuevo a pescar en un río no previsto en el plan de viaje el río Gostlingbach.


Un río pequeñito pero con una gran cantidad de peces de buen tamaño que nos deparó otra buena jornada de pesca.


La experiencia de pesca en Austria ha sido muy positiva, aunque no pudimos pescar lo previsto, especialmente el río Erlauf y el tramo Exclusiv del río Ibbs.


La climatología de la zona en esta época del año, con lluvias muy abundantes, no permite hacer planes muy concretos de pesca. De hecho nos comentaron que si hubiéramos ido una semana antes no habría sido posible  pescar el río Ibbs ningún día.


Éstas características climáticas se reflejan claramente en el paisaje muy verde con bosques muy frondosos con una gran densidad de árboles muy altos y abundante vegetación de todo tipo. Además los suelos de estos bosques son muy arenosos por lo que drenan muy bien y originan en los ríos bancos de arena muy blanca, que en ocasiones dan la sensación de caminar por una playa.


En definitiva ha sido un gran viaje de pesca. Pero ahora ya es momento de empezar a pensar en el viaje del próximo año...