miércoles, 21 de julio de 2010

ASTURIAS JULIO DE 2010

Como en años anteriores me fui de vacaciones a Asturias para dedicarme a pescar durante 15 días.

Este año como novedad no se podía pescar ni lunes ni jueves, a diferencia de los últimos años en los que sólo quedaba como día de descanso el jueves, pero pudiéndose pescar en los cotos de trucha de captura y suelta situados en zona salmonera (Belmonte, Infiesto, Luarca…)

Plantearse 15 días de vacaciones de pesca de los cuales no es posible pescar 4 no deja de ser un inconveniente, que solventé, en parte, pescando los jueves en Galicia.

Trucha pescada con un tricóptero montado en un 18

Además de esta novedad de la normativa de pesca, las complicaciones aumentan todavía más cuando a mediados de junio se producen unas lluvias como jamás en la historia conocida de Asturias se habían producido nunca (y menos en Junio)
Dadas las circunstancias no podía esperar que la pesca fuera muy bien, como así sucedió.

Reo que pasaba de 40 cm

Las consecuencias de las enormes riadas fueron tres principalmente:
1º los ríos bajaban mucho más altos de lo normal
2º las modificaciones de las estructuras de los ríos eran de muy grandes a absolutamente increíbles con árboles arrancados de cuajo, pozos rellenados tablas desaparecidas ….
3º debido a las modificaciones de los ríos con ingentes cantidades de piedras y todo tipo de materiales arrastrados y trasladados de lugar, las eclosiones, que en los días previos a las crecidas me comentan que empezaban a ser abundantes, desaparecen y no se ve casi actividad hasta casi mediados de julio.

Esta trucha nos muestra la librea característica de las truchas de estas cuencas cantábricas.

Durante los primeros días de julio no se veía comer en superficie casi a ningún pez y al que se veía prácticamente no repetía. Tampoco se veía que estuvieran ninfeando o comiendo debajo de la película. Los ríos parecían medio muertos.
Lo malo de no ver peces activos se compensaba un poco con el hecho de que si se detectaba uno y le ponías la mosca rápidamente se la tragaba sin titubear. Se dio el caso en un sereno que vi a 6 peces y enganché 4, de los otros dos a uno le eché mal la mosca por no moverme y tardar lo menos posible y el otro era a última hora casi sin ver la mosca y en un lance muy largo.

Algunos reos mostraban marcas como si las riadas los hubieran apaleado.

Con el transcurrir de los días se empezaron a ver más peces, sobre todo pequeñas truchas y esguines de salmón, y empezó a verse algo de mosca. Conforme la situación iba cambiando también las circunstancias de la pesca iban variando y los peces ya no se comían cualquier cosa, había que adaptarse a la eclosión para evitar los rechaces.

Maca con un reo que ya llevaba un tiempo en el río.

Al final y después de pescar los ríos Miño, Eo, Negro, Cubia, Nalón, Lena y Aller (dos días en coto Luarca y Sotrondio y el resto en tramos libres) haciendo balance de la pesca puedo decir que no ha sido todo lo interesante que debería haber sido, pero que algunos buenos peces han evitado la catástrofe que podría haber sido.

domingo, 17 de enero de 2010

Arcoiriris de balsas.



Dioni con una muy plateada arcoiris ayer 16 de Enero.

Cuando a la baja actividad de los peces, se une el mal tiempo y unos ríos desmadrados y turbios, no queda otra alternativa que ir a pescar a alguna charca intensiva en donde pagas por pescar las arcoíris que ponen a tiro de tu caña.

En estos lugares mantienen una población de truchas arcoíris suficiente para que un pescador no se aburra demasiado, pero en ocasiones puede ser que no piquen, porque aunque sean truchas traídas de una piscifactoría y, por lo tanto teóricamente “facilonas de pescar” hay días que por alguna circunstancia permanecen inactivas o muy poco activas.



Además cuando algunos pescadores se enfrentan ante el problema de pescar estas truchas mantienen el chip que utilizan cuando se enfrentan al problema de pescar truchas en río y además más o menos salvajes. Como resulta bastante lógico son muy diferentes unas truchas de otras y un hábitat y otro, lo que exige soluciones diferentes.


Para las truchas de un río, como pescadores de mosca, procuramos presentar unas imitaciones más o menos realistas de las presas que comen habitualmente (especialmente insectos acuáticos) o bien imitaciones de conjunto o atractoras que pueden hacer que la trucha decida comérselas.



Sin embargo, para las truchas de una de estas balsas o lagunas a veces nos empeñamos en utilizar lo mismo que en el río (suele funcionar porque el hambre y la voracidad propia de esta especie depredadora provoca que se metan en la boca casi todo lo que ven). Pero si las circunstancias no son propicias y no se comen todo lo que ven y sólo comen cuando reconocen algo como comida y además les pasa cerca y no se les va a escapar, entonces se puede complicar el día y nos podemos aburrir mucho si nos empeñamos en mantener el chip del río.


Por lo tanto habrá que utilizar señuelos que tengan cierta similitud con su comida más habitual. No me estoy refiriendo al pienso que comían en la piscifactoría (que probablemente no sería mala idea) sino de lo que les resulte más familiar en su nueva situación. En este tipo de sitios se suele pescar a cebo utilizando maíz, por lo que están acostumbradas a ver “eclosiones de maíz” y también, aunque son estériles, ponen huevas lo que representa un aporte de alimento muy nutritivo.


Por eso las imitaciones que recuerden a los granos de maíz o las huevas suelen funcionar generalmente muy bien. Por lo tanto podríamos hablar de “ninfas de maíz” “estrímer de maíz” hueva o “ninfa hueva” o “estrímer hueva” según el tipo de montaje y la manera de presentarlo.



Si se encuentran activas puede funcionar muy bien cualquier señuelo que resulte llamativo por su movimiento, color, brillos …… También hay que tener en cuenta que, salvo que su actividad sea muy grande, normalmente comen a una determinada profundidad que puede ir variando a lo largo del día y, por lo tanto, tendremos que detectar la profundidad adecuada y presentar nuestro señuelo donde más probabilidades tenemos de lograr las capturas.